http://www.villamanuelita.org/?page_id=13
Espacio recomendado
Espacio recomendado
La flor de No me Olvides es el ícono de nuestra Movimiento. Su espíritu tiene plena vigencia en la actualidad, donde un manto de tergiversación histórica sobre los postulados revolucionarios del peronismo se abaten sobre nuestro movimiento para provocar la inacción y división en nuestras filas.
Profundizar nuestra historia para buscar en ella los elementos que nos clarifiquen el camino hacia la construcción de la Democracia Social y Popular que nos liberará, es un camino irrenunciable de todos los militantes peronistas.
“…la Libertadora detuvo, encerró a todos los que pudo (…) los diarios lanzaban una incesante lluvia de improperios descalificando, injuriando al movimiento caído. El temor se extendía ante un gobierno siniestro que reabría el tétrico penal de Ushuaia para sus adversarios políticos” (1), esa cárcel del infierno blanco que la “barbarie” peronista había clausurado, años atrás, por considerarla inhumana.
“Cómo hacíamos para encontrarnos, reconocernos, hablarnos? – relata Marcos-. En aquel tiempo, todos éramos otros y nadie decía nada. Eramos como ostras cerradas hasta que algo leve, un mutismo expresivo, una manera especial del silencio o un no sé qué difícil de explicar, cómo si fuera un código esotérico para iniciados únicamente, nos hacía reconocernos como compañeros (…).surgían, a veces, algunos signos de reconocimiento, de expresiones pintorescas, por ejemplo, los emblemas de no me olvides en la solapa del saco, el silbido de “fumando espero”, un viejo tango que hicimos resurgir(…). Así reconocíamos, un cumpa, un hermano, un peronista”(2).
(1) (2) Marcos César, en revista Peronismo y liberación, agosto de 1974.
Publicado en “Perón, Exilio Resistencia, retorno y muerte.” de
No hay comentarios:
Publicar un comentario